

A pesar de que muchos comentarista, consideran que el Banco Mundial (BM) es un instrumento de desarrollo, Toussaint demuestra que en realidad es una herramienta más de la política exterior de EEUU. El BM interviene directamente en la vida política de los países miembros (algo que ne debería hacer), pero siempre en los del llamado Tercer Mundo, no en los otros.
Y, a través de la extorsión que supone ser parte esencial en el pago de la deuda exterior de los países empobrecidos, el Banco Mundial interviene en decisiones políticas que sólo deberían ser responsabilidad de los gobiernos de los países endeudados. Por ejemplo, cuando, en 2005, el actual presidente de Ecuador, Rafael Correa, era ministro de Finanzas, quiso elaborar una política presupuestaria que utilizara la mayor parte de ingresos del petróleo en gastos sociales. Pues bien, el Banco Mundial exigió acabar con esa política, el ministro se negó y el Banco Mundial, conjuntamente con el FMI, presionó y maniobró hasta conseguir que ese ministro dejara de serlo.
Por otra parte, una política esencial del Banco Mundial es forzar privatizaciones en los países empobrecidos (esos que ahora se llaman en sutil eufemismo ‘países en desarrollo’), cuando éstos necesitan préstamos de dicho BM. ¿Quieres dineiro? Pues privatiza.


Tras dos décadas de privatizaciones, sabemos que privatización significa que las empresas esenciales de los países endeudados son compradas por las grandes corporaciones transnacionales de los países ricos y pasa lo que pasa. Las empresas igual van bien, pero elpaís se jode.
Privatización significa también convertir la salud, la educación, el agua y otros servicios fundamentales en mercancías. BM y FMI lo justifican diciendo que entran a formar parte del mercado y que el mercado lo regula todo. ¿Cómo pueden ser tan burros (si se lo creen) o tan falaces tras un cuarto de siglo en el que no cesamos de ver los terroríficos resultados de las privatizaciones perpetradas? Tal vez haya que esperar otro cuarto de diglo para ver resultados.
¿Y la acusación de apoyo a las dictaduras? Tal vez en los años sesenta u setenta… Y ahora también. ¿No son dictaduras Pakistán, Guinea ex española, Chad y algunas repúblicas ex soviéticas impronunciables, a los que el Banco Mundial considera buenos clientes? Que más da que no haya libertad ni respeto de los derechos humanos si hay petróleo.
Eran más decentes los gangsters de Chicago en tiempos de Al Capone. Ellos no ocultaban que iban a lo suyo, a enriquecerse como fuera y a costa de lo que fuera. Ahora, el Banco Mundial y el FMI intentar parecer honorables, pero son como esos abogados indignos que defienden clientes canallas porque sacan tajada. En plata: el Banco Mundial y el FMI defienden en realidad los intereses de las potencias más ricas que, para contarlas, nos sobran dedos de las dos manos. Y a los números y datos me remito.


Eran más decentes los gangsters de Chicago en tiempos de Al Capone. Ellos no ocultaban que iban a lo suyo, a enriquecerse como fuera y a costa de lo que fuera. Ahora, el Banco Mundial y el FMI intentar parecer honorables, pero son como esos abogados indignos que defienden clientes canallas porque sacan tajada. En plata: el Banco Mundial y el FMI defienden en realidad los intereses de las potencias más ricas que, para contarlas, nos sobran dedos de las dos manos. Y a los números y datos me remito.