lunes, 21 de mayo de 2007

Abandonar Irak de una vez

Tal vez no estemos acostumbrando a la atroz tragedia de Irak y eso no debe ser. Más allá del conjunto de canalladas que hicieron posible esa insensatez odiosa, es el momento de decir, exigir, gritar que las tropas extranjeras se han de marchar ya de Irak. Y, sinceramente, con datos y cifras inexcusables en mano, no valen argumentos hueros de que si se van ahora, será peor. Una razón más que discutible. ¿Cuántos muertos más se necesitan para que EEUU se convenza de que han de dejar Irak?
Me permito comentar un estupendo escrito del mexicano Carlos Fuentes, quien ha denunciado con brillantez los graves errores del gobierno de Bush en Irak. Dice Fuentes que es una guerra ilegal, pues Sadam Husein no tenía armas de destrucción masiva. Añade que una guerra mentirosa, porque derrocar a Sadam no fue la razón de la guerra, pues en Oriente Medio hay más tiranos que continúan tan campantes, cuando no aliados. Remacha que una guerra claramente contraproducente, porque Sadam y Osama Bin Laden eran enemigos, no aliados, y la invasión norteamericana ha dado a Al Qaeda la entrada a Irak que Sadam le impidió. Y una guerra perdida, ya que el triunfalismo de Bush se ha disuelto ante la imagen constante de destrucción y derrota para Bush.
Fuentes señala que los famosos objetivos cumplidos, aplaudidos hace tres años sobre un portaaviones de EEUU con Bush disfrazado de Snoopy, se han convertido en la mayor ausencia de seguridad para los iraquíes. Además la ocupación ha desenterrado todos los enconos y enfrentamientos religiosos y nacionalistas de Irak, convertido en campo de guerra civil entre chiíes, suníes y kurdos.
Carlos Fuentes recurre a la agitada historia de su país, México, siempre intervenida por el enorme vecino del Norte, México, para finalmente extraer la lección de que hay que dejar que los iraquíes diriman sus pleitos y problemas entre sí, sin intervención extranjera. Y señala que Bush no quiere abandonar Irak antes del fin de su mandato, porque no está dispuesto a admitir la derrota, aún al precio de continuar sacrificando vidas norteamericanas e iraquíes. Posiblemente quiera dejar la patata caliente, dice, a quien le suceda en el cargo.
Y concluye Fuentes: “Que salgan los EE UU de Irak. El caos que siga no será mayor que el caos existente, pero tendrá una virtud: que del caos saldrá algún día una nación más viable que la actual”. Y lo dice desde su propio dolor de mexicano, que conoce como México se encaminó hacia algo más aceptable en cuanto se pudo desprender de la tutela de los EEUU.
Y, ¿saben?, creo que Carlos Fuentes tiene toda la razón.

1 comentario:

Tesa Medina dijo...

Es estremecedor lo que está ocurriendo en Irak. Y creo que todas las personas sensatas estamos de acuerdo en que la intervención de Estados Unidos, a parte de llenar esa tierra donde se sitúa el paraíso del que habla la Biblia de muertos, ha conseguido aumentar la inseguridad no sólo de la zona sino del mundo entero. Ha convertido a un país donde la religión no interfería en el estado en que ésta empiece a organizar y alimentar el odio de los masacrados y de los aludidos por ser musulmanes.
¿Por qué me resulta inconcebible que nadie pueda parar este horror?

A ver si los periodistas se dejan de escribir chorradas y tratan desde sus tribunas de concienciar al mundo de que no podemos dejar el destino de los hombres en las manos de locos y de los intereses económicos de unos cuantos.

Me cabreo con esto, no lo puedo remediar. Gracias por regalarnos estas crónicas tan lúcidas.

Besos